#PrimeraEdición Yolanda Vaccaro, periodista en Madrid, nos comentó acerca de la polémica norma en España que permite salir a la calle con niños. Además, hasta el momento, se tiene conocimiento de más de 209 mil casos confirmados de infectados y un total de 23 mil 521 víctimas mortales a causa del COVID-19.MÁS INFORMACIÓN ► http://ow.ly/1HZy30lzGSoEs responsabilidad de todos que el coronavirus no se propague: #QuédateEnCasa
Yolanda Vaccaro desde Madrid sobre el coronavirus COVID19 en EspañaLos niños salen a la calle en España en confinamiento por coronavirus COVID19
#PrimeraEdición Yolanda Vaccaro, periodista en Madrid, nos comentó acerca de la polémica norma en España que permite salir a la calle con niños. Además, hasta el momento, se tiene conocimiento de más de 209 mil casos confirmados de infectados y un total de 23 mil 521 víctimas mortales a causa del COVID-19.
Reportaje El Comercio sobre peruanos en España y coronavirus
Peruanos frente al coronavirus en España
Reacciones en España ante el coronavirus: desde el miedo hasta las nuevas oportunidades del trabajo online
YOLANDA VACCARO
Corresponsal
MADRID.
Nada de tranquilidad
transmiten las imágenes de médicos y enfermeras mostrando ante las cámaras de televisión
cómo usan bolsas de basura a modo de las necesarias batas. Porque no hay batas impermeables
suficientes ante la crisis del nuevo coronavirus, el COVID19. Tampoco hay
mascarillas, ni guantes. Si estos materiales escasean para los profesionales de
la salud, es fácil deducir que el resto de la población está mucho peor. La
crisis del coronavirus ha pillado a los españoles demasiado confiados en las
capacidades de su envidiable sistema público de salud. A una semana de
decretado el estado de alarma ante el virus, no se sabe cuántos infectados hay
porque que no hay tests suficientes; a las personas con “síntomas leves”
se les dice que permanezcan aisladas en sus casas “hasta que se pase”, que en
la mayoría de los casos “no pasa nada”. Lo último es que la Comunidad de
Madrid, que concentra a más de la mitad de los miles de contagiados, ha enviado
un “kit de autodiagnóstico”: un documento en PDF con preguntas para que uno
mismo responda y deduzca si tiene coronavirus; si es positivo, lo mismo:
quédate en casa para que no contagies a otros y hasta que se te pase. Parecería
un chiste pero suena amargo en las actuales circunstancias, con una persona
muriendo cada 16 minutos en Madrid. Al cierre de este reportaje, España registraba 767 muertes y
17.147 contagios contando solo a los diagnosticados como corresponde, lo
que significa que son muchos más.
Las medidas
gubernamentales, pues, han llegado tarde y parecen insuficientes. Desde hace
dos semanas están cerrados todos los centros educativos, desde guarderías hasta
universidades y, desde el sábado pasado, permanecen cerrados todos los
restaurantes, bares, tiendas y centros comerciales. Pero siguen abiertas las
farmacias y los comercios que dispensan alimentos y otros productos de primera
necesidad, incluidos los informáticos y electrónicos. Y, aunque se conmina a
permanecer en casa, hay demasiadas excepciones: quienes tienen que ir a ver a
ancianos, discapacitados y menores; quienes tienen que ir a comprar
medicamentos, alimentos y otros productos de primera necesidad y, sobre todo,
todos quienes tienene que ir a trabajar, sin discriminación por sectores. Si
las empresas no han habilitado medios telemáticos de trabajo o si el trabajo no
se puede realizar por esta vía, las personas que no van a trabajar son despedidas.
Omar Kuan,
peruano con coronavirus: “Me dieron un papel donde dice que padezco de COVID19
pero el único tratamiento es aislarme en casa por catorce días, y tomar
paracetamol”
En este marco tenemos
el caso del peruano Omar Kuan Lambruschini, residente en Madrid, donde trabaja
como barman en el restaurante de comida peruana Quispe, ahora cerrado, como
todos los restaurantes. El viernes pasado empezó a sentirse mal, con la
garganta muy seca, y llegando a tener 39.8 de fiebre. Acudió a su doctora de
cabecera de la Seguridad Social, quien lo derivó al hospital Fundación Jiménez
Díaz, donde no le hicieron prueba alguna pero le dijeron que seguramente
padecía el coronavirus. Nos cuenta vía telefónica: “Me dieron un papel donde
dice que padezco de COVID19 y el único tratamiento es irme a mi casa, aislarme
allí por catorce días, y tomar paracetamol. Me dijeron que no me hacían el test
porque su protocolo es solo hacerlo a quienes tienen pautas para ser
hospitalizados: mayores de 65 años. A pesar de que yo tengo una condición
coronaria. Me parece todo muy mal”. Omar hace lo que puede en su domicilio,
donde vive con su esposa y el bebé del matrimonio. “Tengo miedo de
contagiarlos”, precisa. Pero añade que, felizmente, con el paso de los días
cree ir sintiéndose mejor.
María Eugenia
Cervantes, odontóloga: atendiendo urgencias sin recibir elementos de protección
María Eugenia
Cervantes, odontóloga peruana propietaria de dos clínicas dentales en Madrid,
se ve atrapada entre varios frentes. Los decretos por el coronavirus la obligan
a atender a sus pacientes pero no dan a los odontólogos “medida alguna de
protección”. Indica: “Hemos cerrado la atención en las clínicas pero atendemos
a todas las urgencias abriendo puntualmente las clínicas o a domicilio.
Obviamente los dentistas no podemos atender a un metro de distancia y, por la
naturaleza de nuestro trabajo, tenemos que ir al foco del contagio, la boca. Y
nadie nos facilita ni hay dónde comprar mascarillas, guantes, batas
impermeables. Tenemos mucho miedo. La Seguridad Social nos obliga sin darnos
medios para que la gente con urgencias dentales no vaya a los hospitales”.
Cervantes, encima, sigue pagando los sueldos de sus 20 empleados sin contar
apenas con ingresos desde la vigencia del estado de alarma.
Gustavo
Salazar, ginecólogo peruano: “Ya estamos atendiendo a las primeras gestantes
con el virus”
Gustavo Salazar,
médico ginecólogo peruano, esposo de María Cervantes, trabaja en el hospital
privado San Rafael. A diferencia de lo que ocurre en la sanidad pública, en el
sector privado sí cuentan con mascarillas y el resto de materiales de
prevención, aunque también empiezan a sufrir restricciones. Tiene más pacientes
que nunca: “El hospital ha incrementado sus servicios porque los hospitales
públicos están saturados, cada vez más pacientes sospechosos. Ya estamos viendo
a las primeras gestantes infectadas por el virus. Felizmente, no transmiten el
virus a los fetos. El hospital ya está habilitado por si algún hospital público
nos deriva a algún paciente porque tenemos capacidad por el momento. Nosotros
sí tenemos suficiente material de protección aunque esto está restringido, solo
se entrega a médicos internistas y de urgencias”.
Gustavo nos cuenta
que está ayudando vía telemática a cuatro compatriotas diagnosticados con
coronavirus que están en sus casas aislados. “Nos van contando sus síntomas
para darles recomendaciones y, si empeoran, decirles que vayan a un hospital.
No los han hospitalizado porque tienen entre 35 y 45 años”, señala.
Malena Francia:
Tiempo para reflexionar “y ponernos en sintonía con nosotros mismos”
Malena Francia,
también peruana, es responsable de un centro de desarrollo de nuevas empresas
en Villaverde, dependiente del Ayuntamiento de Madrid. Ella, como todos los
empleados del municipio madrileño, trabajan desde casa desde antes del decreto
de alarma. A pesar de estar preocupada porque una persona que acudió a su
centro de trabajo antes del cierre ha sido diagnosticada con el virus, Malena
ve positivo el aislamiento social, frente a lo que manifiestan sentir miles de
españoles que, a través de redes sociales, expresan miedo, tedio y hasta
desesperación en esta situación. Malena apunta que este aislamiento “se vive
dependiendo del carácter de cada persona. Yo estoy tranquila y nos viene bien
la reflexión en este momentos, en este tiempo de tranquilidad podemos acumular
fuerza física y mental, ponernos en sintonía con nosotros mismos”.
Ainhoa Uribe, Ainhoa
Uribe, Vicerrectora Adjunta de Internacionalización y Transformación Digital:
“Hemos encontrado nuevas posibilidades de negocio online”
Mientras
miles de empresarios y trabajadores ven cómo sus negocios y puestos de trabajo
peligran ante el cierre forzoso y sin fecha de reanudación, hay quienes sacan
partido sabiamente de la situación, haciendo de la necesidad virtud, como se
dice en España. Es el caso del grupo educativo CEU, que posee tres
universidades, dos escuelas de negocios y diez colegios en el país, con 33.000
alumnos. Ainhoa Uribe, Vicerrectora Adjunta de Internacionalización y
Transformación Digital , precisa que antes de que se decretara el cierre de los
centros de enseñanza, CEU repartió computadoras, tabletas y celulares, y dio
cursos acelerados a todos sus profesores para que sean capaces de mantener sus
clases, exámenes y toda la operativa educativa en marcha, dure lo que dure
cualquier confinamiento. Así que “ningún estudiante CEU está perdiendo clase”,
indica. “Hemos creado una red de embajadores digitales con profesores más
tecnológicos que están ayudando a los otros compañeros por teléfono. Dejamos
las clases grabadas para los alumnos internacionales que han regresado a sus
casas, por la diferencia horaria. Cada día monitorizamos a todos, pasamos
listas, recibimos muchas felicitaciones de padres y alumnos”. Es más,
manifiesta: “Somos más comunidad digital que antes, de los grandes problemas a
veces se sacan ideas y oportunidades que van a durar. Con esto hemos encontrado
nuevas posibilidades de negocio. Además, estamos tan ocupados y con tanta ayuda
entre nosotros que no tenemos esa sensación de soledad que tienen otros amigos
o familiares”.
[ÚLTIMO MINUTO] Se confirma la muerte de un peruano en España a causa del coronavirus. Se trata de Roberto Wilmer Poma Rojas, quien falleció en Madrid ► https://t.co/7ocIi5WBJhpic.twitter.com/qM1tGOnX6I
Un peruano, identificado como Roberto Wilmer Poma Rojas, falleció el 18 de marzo en Madrid a causa de una complicación tras contagiarse con coronavirus informó la colaboradora de América Noticias en España, Yolanda Vaccaro.
El hombre, que nació el 30 de abril de 1970 en nuestro país, ingresó al hospital público de la capital y permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos hasta su deceso. El hombre desarrolló en muy poco tiempo los síntomas de la enfermedad.
Según informaron las autoridades y de acuerdo a los protocolos de sanidad de España, el cuerpo será cremado y no habrá funerales por medidas de bioseguridad.
Se ha conocido también que el migrante peruano trabajaba en el sector construcción. Existen 60 000 peruanos en viviendo en esa ciudad, una de las comunidades más grandes en el extranjero que ahora está en alerta por el coronavirus.